El martes 25 se llevo a cabo el primer evento del «Ciclo de charlas astronómicas UDP: Charlas y noches de telescopios», donde el profesor Manuel Aravena del Núcleo de Astronomía, habló sobre los avances del Telescopio ALMA a más de 130 personas.

La charla titulada «El universo invisible revelado por el telescopio ALMA» comenzó con la introducción del Manuel hecha por Roberto Assef, astrónomo UDP, haciendo referencia a sus estudios en radioastronomía en el Instituto Max Plank y a su etapa como NRAO (National radio Astronomy Observatory) Fellow, en Charlottesville, entre otros. Acto seguido, habló de la importancia del trabajo de Aravena en el Telescopio ALMA.

Manuel comenzó explicando las características de la luz, o radiación, y cómo se divide en rangos según su longitud de onda y energía (visible, radio, infrarrojo, ultravioleta, microonda, etc.). También habló de cómo estas radiaciones, en su mayoría invisibles al ojo humano, nos afectan de diversas maneras, por ejemplo los rayos ultravioleta, que provocan las quemaduras en la piel debido a su alta energía. Mencionó también que existe radiaciones invisibles de baja energía, como la infrarroja y el radio.

Luego explicó que cuando estas radiaciones provienen del espacio, usualmente se ven interrumpidas por la atmósfera, ya que esta actúa como una barrera que bloquea o permite el paso de la radiación, dependiendo de su longitud de onda. De esta manera, la luz que llamamos «visible» atraviesa completamente la atmósfera, pero los rayos UV, X y gamma son bloqueados. En el rango infrarrojo y radio hay algunas longitudes de onda bloqueadas, pero para este último existe una gran «ventana» en la transparencia atmosférica, gracias a la cual las ondas de radio fluyen libremente, permitiéndonos observarlas desde la Tierra. De la misma manera las ondas infrarrojas y de radio atraviesan las nubes de gas y polvo interestelares, permitiéndonos ver a través de estas en el espacio.

Manuel ilustró esto primero con la foto de un sector específico de la Vía Láctea, donde a simple vista pareciera haber un vacío de estrellas, pero una segunda foto tomada en Infrarrojo revela que este sector está lleno de estrellas. Otro ejemplo de la utilidad de estas radiaciones es cuando podemos ver el interior de nebulosas y galaxias, particularmente en zonas de formación de estrellas.

«A eso nos referimos con Universo invisible, al observar en infrarrojo u ondas de radio, podemos ver a través de estos velos o capas y ver lo que esta detrás» 

Dijo Manuel.

Tras explicar las funciones del infrarrojo en la astronomía, Manuel dio paso para hablar sobre el Telescopio ALMA. En primer lugar explicó las razones de por qué se instaló el observatorio en Chile y los beneficios que esto trae para la comunidad científica chilena, para luego pasar a explicar como funciona el observatorio.

También enfatizó otra cualidad de ALMA: La capacidad de poder transportar las antenas dentro del recinto, lo que permite distribuir las antenas dentro del llano de Chajnantor y formar, mediante la interferometría, una antena virtual de hasta 16 kilómetros, aumentando la calidad de las imágenes observadas.

Concurso de trivia astronómica

Tras finalizar la charla, debido al estado del clima no fue posible llevar a lado las tradicionales observaciones con telescopios desde la terraza de la Biblioteca Nicanor Parra. En lugar de esto,  los participantes pudieron gozar de una pausa con cafe y galletas para luego participar en el concurso de trivia astronómica organizada por Erika Labbé, Coordinadora de Divulgación del Núcleo de Astronomía.

La trivia se dividió en cuatro desafíos donde los participantes debían utilizar sus conocimientos en astronomía para identificar y reconocer los distintos cuerpos celestes, galaxias, e incluso satélites y sondas artificiales. Durante más de una hora las personas del público participaron con gran energía y entusiasmo, y al determinar los resultados, contaron con las explicaciones científicas de Roberto Assef y Manuel Aravena, ambos profesores del Núcleo.

Los ganadores de los diferentes desafíos se llevaron de regalo un modelo a escala de una antena de ALMA para armar. Mientras que los demás participantes se llevaron chocolates.

«Lo pasé muy bien haciendo la trivia. Nos reímos mucho, y se notaba el interés de la gente, no solo en ganar los premios, sino que en participar. Varios de ellos llevaban a cabo todos los desafíos, sin estar concursando.»

Entre los más de 130 asistentes, se destacaron la presencia de varios niños menores de 15 años entre ellos Gabriel (13) y Vicente (11) Sepúlveda,  quienes se quedaron hasta el final del evento.  participando incluso en uno de los desafíos. Ambos quedaron muy asombrados por la charla y  los descubrimientos del Telescopio ALMA.

«Fue muy buena charla y quede con muchas ganas de volver a los próximos eventos»

Comentó Gabriel Sepulveda mientras que Vicente dijo.

«Los descubrimientos y todas esas imágenes son asombrosas , estoy con ganas de volver»

Pero no solo niños asistieron al evento, también astrónomos y estudiantes de astronomía, es el caso de Ignacio Leon, astrónomo de la Universidad Católica, quien quedo sorprendido por la gran calidad de la charla de Manuel.

«Fue una charla muy didáctica, expuso muy buenas explicaciones de cosas que incluso yo no sabia, sumado a la aplicación de material audiovisual de gran calidad»

Comentó fascinado. Entre la gran variedad de asistentes también esta el caso de Benjamin Peña, estudiante de derecho, quien esta interesado en el marco legal de la astronomía.

«Chile debe tener un código astronómico  y realizar cambios en la legislación, ya que Chile es uno de los centros astronómicos más importantes y debe mejorar su respaldo legal»

La charla fue transmitida en vivo por el canal de Youtube del Núcleo, y recientemente se publicó la versión profesional del video, que pueden ver a continuación:

Al finalizar los concursos, Erika Labbé dejo invitados a todos los participantes a la siguiente charla de Amelia Bayo «Observaciones astronómicas ¡Cuanto hemos cambiado!» para el día martes 22 de septiembre.